Ventajas de las soluciones de la OMPI
Las oficinas de propiedad intelectual pueden elegir a la hora de implementar soluciones empresariales para la automatización de los procesos internos y la prestación de servicios en línea. Hay un pequeño número de empresas privadas que ofrecen programas informáticos diseñados explícitamente para operaciones de P.I. (sólo dos proveedores han comercializado con éxito soluciones para más de una oficina de P.I.). Las oficinas de propiedad intelectual también pueden utilizar sus propios recursos de TI y/o proveedores locales de TI para desarrollar sus propias soluciones. Estas opciones tienen ventajas y desventajas en comparación con la solución de la OMPI, como se describe a continuación.
Tiempo y características de implementación
La OMPI aporta más de 15 años de experiencia acumulada trabajando en proyectos con más de 80 oficinas de propiedad intelectual. Las oficinas encontrarán la mayor parte de la funcionalidad que necesitan para administrar el proceso de registro de la propiedad intelectual en las soluciones de la OMPI y, gracias a las considerables opciones de personalización disponibles, el sistema estará listo para su uso operativo en un plazo relativamente breve (siempre que esté listo, como se ha indicado anteriormente).
El software desarrollado en casa normalmente requiere tiempo y esfuerzo considerables para construir desde cero o utilizar y personalizar plataformas comerciales.
Flexibilidad
Gracias a su diseño gráfico de procesos, el software es totalmente personalizable para satisfacer las diversas necesidades de los Estados miembros, desde pequeñas oficinas con procesos sencillos hasta oficinas de tamaño medio con procedimientos muy complejos. Los cambios en la legislación o en los procesos administrativos pueden introducirse rápidamente en los sistemas con poco esfuerzo y a menudo sin programación. Esto aporta una mayor flexibilidad al software de la OMPI en comparación con las alternativas internas o comerciales que tienden a abordar el menor número de oficinas de P.I. a las que se dirigen y que, por lo general, requerirán la intervención del proveedor de servicios para que los cambios en el software respondan a necesidades funcionales o de procedimiento. Esta flexibilidad permitirá además a los Estados miembros tener un mayor control sobre la solución y, en última instancia, asumir la propiedad del sistema con una dependencia cada vez menor de la OMPI o de los proveedores de servicios para su administración.
Riesgo
Dado que el programa informático de la OMPI se ofrece bajo el mandato de la organización y su programa de asistencia técnica aprobado por los propios Estados miembros, el riesgo de discontinuidad del programa informático y/o su apoyo a las oficinas es mínimo. En comparación, las alternativas desarrolladas internamente o comerciales dependen en gran medida de la disponibilidad de recursos de desarrollo y/o disponibilidad de fondos para renovar o enmendar el contrato con los proveedores para cambios y apoyo.
Coste
El software de la OMPI se ofrece gratuitamente a los Estados miembros, aunque existen costos asociados con la compra de infraestructura de TI y la obtención de recursos para ejecutar partes del proyecto. Las alternativas comerciales típicamente implican un costo sustancial para el cliente, mientras que las desarrolladas internamente requerirán un costo para cubrir los recursos de desarrollo, ya sea que se realicen con recursos locales o externos.
Soporte
El apoyo de la OMPI se ve limitado por los recursos disponibles, que deben ser compartidos por todas las oficinas de propiedad intelectual que utilizan las soluciones. Los tiempos de respuesta y los acuerdos de nivel de servicio se proporcionan sobre la base del "mejor esfuerzo", sin garantías. El personal de apoyo tiene su sede en Ginebra y es difícil proporcionar recursos de apoyo in situ.
Los proveedores comerciales y las empresas locales de TI suelen proporcionar un acuerdo de nivel de servicio en el que se garantizan los niveles de soporte y los tiempos de respuesta, a cambio de un pago regular. Para algunas oficinas, esta opción puede ser más atractiva, ya que reduce el riesgo en caso de fallo del sistema.